Emi llega a una escuela nueva y vamos conociendo sus gustos y preferencias a partir de la mirada de quien se transforma en su cómplice y compinche. Cuento que permite generar conversaciones, preguntas y reflexiones en torno a qué es ser niña o niño en la sociedad actual.
Emi attends a new elementary school and we get to know her tastes and preferences through the eyes of the person who becomes her accomplice and sidekick. This story generates conversations, questions and reflections about what it means to be a girl or a boy in current society.
Luego de trabajar en Voces que cuentan, el equipo de UNICEF volvió a convocarme y acepté con alegría renovada pues una de las personas que me llamó fue Cielo Salviolo, a quien conocía de cuando colaboré con Paka Paka. La propuesta era componer un relato para lectorxs muy pequeñxs, que formara parte de la colección Cuentos que cuidan, junto a mis colegas Silvia Schujer, Pablo Bernasconi y Graciela Repún. La temática que elegí de las que me propusieron fue equidad de género y di varias vueltas antes de llegar a esta historia.
Lo que más me gustó de esta experiencia fue inventar un saludo entre estxs amigxs y encontrar las palabras que me permitieran contar la historia sin develar quién la cuenta. Y también me puse muy contenta al enterarme que quienes ilustrarían el cuento serían Ivanke y Mey, dos artistas encantadorxs con quienes tenía ganas de trabajar hacía rato.
El resultado tuvo una tirada en papel y también puede descargarse gratuitamente aquí.